15/07/14

Filosofía: ciencias puras, leyes, mundo, hombre, espíritu

Ciencias Puras y Leyes




La filosofía habla de las leyes en el sentido científico de la palabra: leyes físicas, leyes químicas, leyes biológicas; no las confundamos con las leyes creadas por una sociedad a través de su constitución política. Otra forma de referirse a estas leyes es: ciencias puras. La ciencia, establece las leyes y a través de ellas, se forma la técnica. Las leyes son lo claro, lo cierto, el apoyo de toda acción racional. Las ciencias puras y sus leyes estarán profundamente relacionadas con nosotros a lo largo de nuestras vidas, dándole forma a nuestra civilización y, siendo el elemento de claridad y racionalidad en nuestra visión del mundo.

Por otro lado, la filosofía toma por "cosa" o "ente" todo lo que existe en el mundo. Y a pesar de tal diversidad, aún podemos encontrar cualidades comunes entre las cosas o entes. ¿Cuáles son?

  • Primeramente: todas las cosas se hallan en algún lugar ahora.
  • En segundo lugar: los entes están o suceden en determinado tiempo.
  • En tercer lugar: no conocemos cosa alguna que no haya tenido origen o principio en un punto determinado del tiempo.
  • En cuarto lugar: todo ente está sometido al cambio.
  • En quinto lugar: cada cosa es única e individual.

Todo lo que conocemos en el mundo tiene una cierta naturaleza, que podría ser de otro modo y dejar de existir. Muchas personas creen ser necesarias, pero se engañan. Podrían muy bien no ser o dejar de existir, y, probablemente, sin gran daño para el universo.

Todo tiene su espacio y su tiempo, su origen, pasa, cambia, es individual y no es necesario. En este mundo del tiempo y del espacio, compuesto de cosas aleatorias e individuales, vuelven a aparecer las leyes.

La filosofía dice que: si una ley es cierta, lo es igualmente en todas partes. Las leyes verdaderas no se identifican con ninguna idea, no obedece a ningún interés. También están sobre el tiempo. Es absurdo decir que una ley nació ayer o que ha dejado de existir. Son intemporales.

Las leyes o ciencias puras no están sometida a cambio alguno, ni pueden tampoco estarlo.

El Mundo




Nuestro mundo es muy distinto de las leyes o ciencias puras. El mundo es bellamente variado y contiene, distintas especies de cosas o entes. Y aquí es donde surge un problema filosófico.

¿Por qué decimos que nos hallamos aquí ante un problema filosófico? Porque las ciencias puras establecen leyes, las buscan e investigan: pero a ninguna ciencia le interesa lo que es la ley (las leyes sociales).

Las leyes sociales son entes de razón, puras ficciones de nuestro pensamiento. Según el filósofo escocés Hume, las leyes sociales reciben sus necesidades del hecho de que nos acostumbramos a ellas. Luego la costumbre se convierte en un nuevo tipo de "naturaleza" y las personas no pueden pensar ya contra su costumbre.

Por ejemplo: cuando nos acostumbramos a cualquier cosa, creamos una necesidad sobre ella. Sea esta cosa o ente, un carro, una persona, una actividad, una droga, etc. Basta pensar en la necesidad que experimenta el fumador de consumir cigarro tras cigarro.

Hombre y Espíritu





En el hombre hallamos cosas únicas y notables, que no encontramos en el resto de la naturaleza. A eso le llamamos espíritu.

El espíritu es temporal, espacial, mudable, aleatorio e individual. Un espíritu que persista a lo largo del tiempo es absurdo. Todo espíritu es siempre el espíritu de una persona. No puede estar en dos personas. Como un trozo de madera no puede estar, al mismo tiempo, en dos lugares.

Las personas interpretan las leyes de dos maneras: de forma positiva y de manera idealista. Por ejemplo, el cristiano cree que existe Dios y que el alma es inmortal; pero su fe no le obliga a creer en lo ideal. Por otra parte, los comunistas afirman que todo es material; pero admiten a la vez que existen las ciencias puras, las cuales son necesarias no sólo en el pensamiento, sino en el mundo material. En cierto sentido, son mucho más idealistas que los cristianos.

Esta cuestión no es un tema ideológico, sino que pertenece plenamente a la filosofía.

Lo ideal se divide en distintas escuelas según la manera de entender ese ideal. Grosso modo, tres son las que podemos consultar:

  • Lo ideal existe independientemente de lo real, y forma un mundo espacial antes y por encima del mundo material.
  • Lo ideal existe ciertamente, pero no separado de lo real: existe sólo en lo real.
  • Lo ideal sólo se da en el pensamiento.

Conclusión


La cuestión de aprender lo básico de la filosofía es, tener herramientas mentales que nos ayuden a ordenar nuestras ideas y pensamientos, para poder construir nuestro modelo mental, el cual dictará el camino a seguir a lo largo de nuestra vida.

¿Qué pasa sino cuando no nos esforzamos por conseguir este tipo de recursos? Entre otras cosas, estamos más expuestos a adoptar ideologías, modas, prejuicios, etc. creados por personas ajenas a nosotros. Manteniéndonos presa de la aceptación exterior, cruzando por un camino que conduce a la ansiedad, depresión, inseguridad, entre otras cosas.

Es nuestra obligación construir una filosofía de vida propia. Conforme vamos avanzando y obteniendo experiencia de vida, estos modelos mentales pueden cambiar, al igual que nuestros intereses y deseos. Así es el camino, así es como cada uno aprende a vivir... Eso es hacer uso de la bondad inmerecida del libre albedrío.

¿Crees que es casualidad que hayan eliminado las clases de filosofía y civismo de la escuela? Es más fácil dominar e influir sobre una sociedad que solo repite lo que se le dice, que una sociedad que siempre pregunta ¿por qué?